En este artículo te vamos a enseñar cómo preparar una buena cachimba de Marihuana, o si prefieres llamarla así, una buena shisha de marihuana.

Lo primero que te vamos a enseñar es cómo prepararla directamente, por si ya sabes lo que es una shisha, o si simplemente quieres saber cómo se hace y pasas de más información. 

Después de haberte dicho cómo hacer la cachimba de marihuana, tienes todo lo referente a una cachimba, qué es, qué partes la componen, cómo limpiar la shisha, etc…

Vamos al lío.

Shishas de calidad de oro y diamantes.

¿Qué necesitas para hacer la shisha de marihuana?

Lo primero es lo primero, y por tanto vamos a listarte todo lo que necesitas para la elaboración correcta de tu cachimba de marihuana. Y cuando decimos listarte, nos referimos a todo, aunque te parezca obvio.

 

Primero los utensilios, que son obvios, pero ya hemos dicho que todos, que luego se nos olvida lo esencial y la liamos.

 

  • Una cachimba o shisha: pues aquí la que tengas o puedas conseguir, bien comprándola o de algún amigo, no te aconsejamos alquilarla (en algunos sitios las alquilan, pero ufff). Más adelante en el artículo, si eres de los que no saben qué es una cachimba o shisha, te explicamos que es por partes, cómo montar una shisha, cómo limpiarla, etc…, si eres de los que ya lo saben, pues ve directamente a cómo preparar la shisha de marihuana. 
  • Un hornillo: Esto te servirá para calentar los carbones que vas a utilizar para la combustión de la mezcla que vayas a poner en la shisha. Los hay de gas y eléctricos, la ventaja de los hornillos eléctricos es que los tienes disponibles (que los puedes usar) en cualquier sitio que tenga un enchufe, pero si eres de los que le gusta una buena fumada al aire libre, pues no te será útil a no ser que tengas también un generador eléctrico a mano, que no creo que sea el caso. Mientras que la ventaja de los hornillos de gas es que son altamente portables, es decir, su fuente de energía, el gas, es una botella pequeña, de hecho de las más pequeñas, con lo que su transportabilidad es máxima.
  • Carbón: Ya que hemos comentado en el punto anterior lo que vamos a usar para calentar el carbón, tiene sentido que hablemos ahora del carbón para cachimba. Este lo tenemos en dos formatos, y ya se trata de usar el que más te guste o más cómodo te resulte, te contamos los dos tipos que hay y sus características. de forma que elijas el que más te convenga o prefieras. 
    • Carbón natural (o vegetal): Este es, cómo su nombre indica, un carbón natural, procedente de fibras vegetales, lo que le confiere además, la clasificación de ecológico (teniendo en cuenta todo lo ecológico que pueda ser algo que vamos a combustionar). Suelen estar hechos de fibra de coco, y su principal ventaja es la duración, un buen carbón de coco te puede garantizar una buena y larga fumada si gestionas bien el calor que le suministras a la cazoleta de la cachimba. Su principal desventaja (por no decir la única), es el tiempo de encendido, hay que tener en cuenta que es carbón natural, con lo que para que prenda, hay que suministrarle mucho calor durante mucho tiempo, y no estamos diciendo con mucho calor poner el hornillo a tope, sino, con una temperatura que no calcine el carbón, mantenerlo hasta que “se prenda”. 
    • Carbón de autoencendido (o automático): Este, a diferencia del vegetal, no es del todo natural, sus componentes no solo son fibras en forma de carbón, sino que incluye entre ellos, combustibles rápidos, para precisamente, proporcionar un encendido rápido, que es su principal ventaja. Y esta, en realidad, sería la única razón por la que deberíamos utilizar este tipo de carbón, porque tengamos una necesidad de encendido rápido, ya que cómo hemos dicho, estos componentes inflamables para que prenda rápido, la desventaja que tienen es que aportan ese sabor a combustible a la fumada, que en realidad, para un poco desagradable.
  • Cubrevientos: Un cubrevientos en realidad lo vas a utilizar si estás fumando al aire libre, pero es que en verano, en esas tardes de refresco, una shisha al aire libre es un placer. Con el cubrevientos (también lo llaman cortavientos), evitarás que tus carbones se consuman con el aire, también los mantendrás en su sitio si el sitio donde tengas la shisha no es muy estable y se mueve, al estar los carbones en lo alto de la cazoleta (si no sabes qué es una cazoleta, te lo explicamos más adelante), pues con el movimiento pueden caer (y se lía parda). 
  • Pinzas: Esto es una tontería pero en realidad es un utensilio imprescindible que si te lo dejas, te acordarás de él antes o después. Con las pinzas vamos a manipular el carbón cuando esté encendido y colocado en su sitio. De vez en cuando, necesitaremos mover ese carbón, o cambiar su cara para aprovechar  el calor de la cara no apoyada en el papel de plata. 
  • Papel de plata: Este no es el papel de plata típico que tenemos en casa (que se puede hacer con este, si, pero necesitaremos varias capas). Este papel de plata es un papel de un grosor elevado, precisamente porque es la base sobre la que vamos a poner el carbón encima de la cazoleta. para ello lo que vamos a hacer es cubrir la cazoleta bien, que no queden huecos, y tras tenerla bien cubierta, vamos a agujerearlo en forma de espiral hasta crear un “buen sistema de ventilación”, con esto conseguiremos que el calor de los carbones se transmita a la mezcla que utilicemos en la cazoleta sin que haya contacto y que por tanto no se queme. 
  • Una boquilla: Sí, una boquilla, ¿y por qué decimos que una boquilla?, pues porque la boquilla es una parte bastante particular de la cachimba ya que es la parte que entra en contacto con nuestra boca, así que si eres de los/as asquerositos/as, mejor que tengas tu propia boquilla que no intercambies con nadie. A propósito de esto, que sepáis que se venden boquillas desechables, que quizá no sean tan glamurosas cómo las otras, pero oye, tienen su utilidad.


Ahora que ya sabes que necesitas para prepararla, te contamos los ingredientes para la cachimba de marihuana.

Ingredientes para preparar una buena shisha de marihuana

  • Contenido de la base: Agua, zumo o licor. En cuanto a este ingrediente vamos a puntualizar algo, hemos puesto licor, pero en ningún caso la utilización de licor hará que tu shisha tenga efecto alguno de “subidón” por el alcohol, sino que simplemente, con suerte, se transferirá algo de sabor a la calada que le des, y esto ocurre más normalmente con el whisky, pero de “punch” nada de nada, es más, casi que lo único que conseguiréis añadiendo alcohol a vuestra shisha es hacer una shisha más cara pero nada más.
    Con respecto al zumo, este si transfiere sabor a la fumada.
    Al agua, hay quien le echa unas gotas de limón o naranja (bueno, un apretón de gajo más que unas gotas), con esto también le dan un punto de sabor a la calada.
    Y por último, si quieres un humo espeso, añade hielo a la base.

     

     

  • Mezcla: Aquí está el kit de la cuestión, en la mezcla. Para la mezcla podemos usar solo marihuana, eso haría la perfecta cachimba de marihuana que parece que queremos, peeeero, resulta que la marihuana para que podamos fumarla, pues ha pasado por un proceso de secado, lo que hace que su nivel de combustión sea muy alto, y si solo utilizamos marihuana en la cazoleta, esta se habrá consumido ante de que nos hayamos dado cuenta. Por tanto, para la mezcla, sí, marihuana, pero también tendremos que mezclarla con algún tipo de tabaco o hierbas para cachimba. Si vas a utilizar tabaco o hierbas, pues lo aconsejable es que fueran lo más neutros posible, para de este modo, poder saborear los tintes de la variedad de marihuana que vayas a utilizar. O si esto te da realmente igual, pues entonces puedes escoger el sabor de hierba o tabaco que más te guste, que hay muchos y muy variados, fruta, chucherías, miel… un buen montón.

 

Hasta aquí los ingredientes y todo lo que necesitas para preparar una buena shisha de marihuana.

Proceso de preparación de una cachimba de marihuana

Lo primero que haremos es preparar la cazoleta y los carbones, mientras preparamos la cazoleta y la base de la shisha con los ingredientes líquidos que queremos usar, podemos poner a calentar el carbón.

Ponle a la base lo que más te apetezca, pero nosotros te aconsejamos agua, es cómo más “real” te va a salir el sabor de la mezcla para la cazoleta.

Si quieres que la cachimba tire mucho humo ponle hielo a la base.

Si la mezcla que le echas a la cazoleta es “neutra” ( te da un poco igual, porque usas tabaco sin sabor “especial” y marihuana), entonces sí, ponle licor (whisky) o zumo, si es esto último, si usas cítricos (limón, naranja, kiwi, etc…) el sabor será divertido y chispeante.

En cuanto a la mezcla de la cazoleta, pues ya hemos dicho, usa o solo marihuana (no te lo aconsejamos) o mézclala con el tabaco o hierbas (incluso gelatinas) que más te guste y, a fumar.

 

Visto todo lo que necesitas para tu buena fumada, si eres de los que no sabe que es una cachimba, de que se compone, cómo limpiarla etc…, te lo explicamos a continuación.

¿Qué es una cachimba o shisha?

Pues una cachimba o shisha no es más que un utensilio más para fumar. Originalmente no se concibieron para fumar marihuana, aunque rápidamente se les sacó provecho en los fumaderos de opio de la época.

Es de origen oriental, hay quien dice que de oriente medio y quien dice que de India, Turquía o Egipto, lo cierto es que no se establece muy bien la procedencia original de la cachimba pero sí que la zona es norte de África, Oriente medio o India.

Es un útil para fumar que se puso muy de moda en Europa y Estados Unidos no hace relativamente mucho, hablamos de los 70-80.

En resumen se puede decir que la inventó el médico Irfan Shaikh de la India allá por los años 1550 más o menos, aunque como decimos, no hay un consenso claro sobre esto.

Partes de una cachimba

Te mostramos las partes que componen una shisha. Empezamos de abajo a arriba

  • Base: Es la parte en la que ponemos el líquido que vamos a usar en nuestra shisha para que pase el humo por el, este puede ser agua (lo más típico y tradicional), licor (recomendamos whisky) o zumos.
  • Mástil: Es por donde pasará el humo hasta nuestra manguera, por donde saldrá a través de las válvulas de purga (unas o más) y donde colocaremos el cenicero y la cazoleta, que tendrán encima los carbones.
  • Válvula: Es una pequeña bola que se levanta al soplar la manguera de la cachimba para eliminar el aire o humo viciado que queda en ella. (No os emocioneis soplando que podéis liarla parda).
  • Conector: Este se sitúa en la misma zona que la válvula de la cachimba, es decir, en la parte baja del cuerpo, zona lógica si pensamos que el humo viaja desde la cazoleta hacia la base y luego tiene que subir hasta la manguera pasando por el líquido que le hayamos puesto a nuestra base de cachimba.
    El conector de la manguera de la cachimba, al igual que el cuerpo y la válvula, está hecho de un material inoxidable.
    De hecho, cuerpo, conector y válvula suelen estar hechos en la misma pieza, con lo que el material es el mismo.
    Evidentemente, este sirve para conectar la manguera por la que vamos a fumar, a nuestra cachimba y es por donde pasará el humo que inhalemos.
  • Cenicero: Es un plato donde caerán los restos de ceniza que generan los carbones
  • Cazoleta: Bueno, en realidad no es parte de la cachimba sino un componente que es necesario para poder colocar el tabaco ( o lo que sea) que nos vayamos a fumar. Como decimos, no es parte de la shisha pero si un componente imprescindible (ya dirás tú cómo se fuma sino).
  • Manguera: Es la parte por la que pasará el humo hasta nuestra boquilla y por tanto con lo que podemos fumar. Tampoco es parte de la shisha, de hecho, se vende a parte, claro que también las hay que vienen con ella ya al ser un componente imprescindible. Las hay de silicona y de plástico, también lo que llamamos “tradicionales” que son metálicas por dentro y recubiertas de piel, un verdadero caos para limpiarlas, además de que se oxidan por dentro con las consecuencias que puede acarrear si fumamos con la manguera oxidada. Os aconsejamos las de silicona, mucho más duraderas y fáciles de limpiar.
  • Boquilla: Otro componente que aunque no es de la cachimba en sí misma, se nos hace imprescindible para poder fumar, es precisamente lo que nos llevamos a la boca, y es por esto precisamente que no aconsejamos compartir.

Cómo limpiar una cachimba de manera correcta

Bueno, una de las cosas que hay que tener muy presente a la hora de que la cachimba te dure un buen tiempo, es que hay que mantenerla limpia. 

Hay que mantenerla limpia por dos motivos, por durabilidad de la shisha y para que cada fumada aporte su sabor y no el de fumadas anteriores.

 

Os explicamos cómo limpiar una shisha correctamente.

 

Comencemos por la o las mangueras. Cómo hemos dicho antes, hay dos tipos de  mangueras, las tradicionales y las de silicona o plástico.

Si tienes de las primeras, pues sí, muy chulas pero una pesadilla para limpiar y mantener. Tendrás que redoblarla, golpearla y soplar muy muy fuerte por uno de los extremos de la manguera, ya que estas, al tener un interior metálico, y nada menos que de hierro, no se pueden lavar con agua porque se oxidan.

Si tienes de las segundas (también son las más comunes) pues en este caso se nos hace más sencillo limpiarla ya que podemos usar agua para limpiar el interior de la manguera.

Además añade unas gotas de limón, el ácido cítrico de su zumo hará que los olores más persistentes desaparezcan fácilmente.

Mete el agua con el zumo de medio limón por uno de los extremos de la manguera y tapa el otro, comienza a agitarla para que el líquido que has metido llegue a todas partes.

Enjuaga con abundante agua y listo.

 

Una vez hecho, seguiremos con la base de la shisha, esta normalmente es una base de cristal, con lo que lavarla será relativamente fácil atendiendo a la fragilidad del cristal con el que esté hecha. Poco que explicar aquí, no es más que un vaso grande.

 

También tenemos que limpiar el mástil de la cachimba esto también es fácil con unos cepillos de varilla larga que se venden en tiendas especializadas de cachimbas. Puedes utilizar para limpiarlo un poco de agua con zumo de limón o bicarbonato para eliminar los olores.

 

Limpia bien las juntas de la cachimba, estas normalmente suelen ser unas piezas de goma que se colocan en las juntas para que la shisha no tenga pérdidas de humo o tiro.

Al estar hechas de goma, asegúrate bien de haberlas secado, sino corren el riesgo de deteriorarse rápidamente. 

 

La cazoleta, pues en la cazoleta es donde hemos puesto la mezcla y donde más olores y sabores se quedan adheridos. Frotala bien con agua y jabón (lava-vajillas es suficiente, no es necesario nada especial) y listo, tendrás una cazoleta lista y reluciente para una nueva fumada.

Conclusión

Ya sabes cómo hacer tu cachimba de marihuana, incluso, si no lo sabías, ya sabes qué es una shisha, qué partes la componen y cómo debes limpiar tu cachimba.

Ahora lo único que tienes que hacer es preparar la tuya y disfrutar de la fumada, y si no tienes, nosotros te ponemos una, elige entre todas las que disponemos.